Conocer tanto talento en jóvenes que se destacan en nuestro país es algo maravilloso, haberlos tenido en nuestro Atrio Central nos llena de orgullo y honor.
Quiero hablarte de Julio Monteverde, un joven venezolano que tuvimos la oportunidad de conocer y ver su talento en el escenario de Acrópolis Center. Cuando lo vi en tarima supe inmediatamente que es un ser humano con grandes cualidades y para este artículo, confieso que conocí muchísimo más de él; es por esto que quiero que ustedes también conozcan de este super talento que ha adoptado la República Dominicana.
Llegó hace dos años a nuestro país, enfrentándose a nuevos retos ya que al emigrar a un lugar donde no conocía a nadie, comenzar desde cero, enfrentó prejuicios, diferencias culturales y desconocimiento de muchas cosas, sin embargo, encontró manos amigas que le apoyaron en sus inicios.
Es un ser humano con deseos de crecimiento, disfruta las buenas amistades, los grandes logros y ayudar a los demás. Cree fielmente en la comunicación como herramienta para relacionarnos con Dios, con nuestro entorno y con el mundo. A lo largo de su vida ha ido descubriendo que la sana relación con las personas es la clave para triunfar como sociedad y la construcción de nuestro futuro depende de la voluntad de hacer el bien y crecer constantemente.
Actualmente en República Dominicana trabaja en la asesoría integral de empresas en el área de comunicación y gerencia estratégica. Gracias a la pandemia creó una agencia de marketing digital con clientes en México, Ecuador, EE. UU, Chile, Venezuela y por supuesto aquí en Quisqueya, lo que le ha hecho crecer a nivel profesional por lo urgente de la respuesta ante esta crisis.
Nuestro protagonista de hoy se destaca como joven emprendedor y como uno de los charlistas más activo que ha pasado por la familia Acrópolis Center. Tú, joven emprendedor, a ti no solo si eres dominicano, también si eres extranjero y llegaste a puerto Quisqueyano, Julio Monteverde te dice lo siguiente:
“El mensaje más importante que puedo darle a los jóvenes es que se preparen, aprendan, estudien y sean cada vez más evolucionados en sus oficios y emprendimientos. Ya no es suficiente estudiar en la escuela y ya, es necesario saber de redes sociales, finanzas, oratoria, salud, relaciones públicas, gerencia y negociación y mucho más. Sofisticar nuestras capacidades les va a dar la oportunidad de destacarse y poder aportar… no es suficiente un dominicano que triunfe en el mundo: deben ser cientos o miles de dominicanos que sobresalgan en cada área del saber humano, que haya un pedacito de valor dominicano en cada rincón del planeta. No debemos privar al mundo del valor que tiene esta tierra.”
Escrito por: Miosotis Rossi
